Reseña: Cero se repite siempre - Gabrielle Prendergast

Zero Repeat Forever (The Nahx Invasions #1)
Gabrielle Prendergast
Océano Gran Travesía - 2018
456 páginas
17,95 €

OCTAVO es un soldado de bajo rango del ejército Nahx carente de voz propia, pero sabe cuál es su deber: proteger a su compañera, y dejar que sea ella quien dispare, quien mate a los humanos.
RAVEN es una chica de dieciséis años de edad que se encuentra en un campamento de verano cuando ocurre la terrible invasión de los Nahx. Aislada en el bosque, Raven sólo puede esperar el rescate, pero un alienígena asesina a su novio y ella se oculta para evitar sufrir su mismo destino.
Arrojados en un mundo violento y desconocido, Octavo y Raven son presas del odio y el miedo. Pero cuando Raven es gravemente herida, y Octavo abandona su unidad de asalto, su supervivencia dependerá de la confianza que puedan depositar el uno en el otro.

Últimamente Gran Travesía está apostando por libros de ciencia ficción y sus últimas publicaciones en juvenil cuentan con una premisa con gran potencial.

Este mes de febrero llega Cero se repite siempre de una autora todavía desconocida aquí y que ha resultado ser una lectura bastante buena.

Hacía tiempo que no leía algo sobre invasiones extraterretres. ¿Gobiernos opresores? Sí. ¿Realidades virtuales, mundos fantásticos o viajes galácticos a otros planetas? También. Pero creo que desde La quinta ola, con el que guarda algunas características, no había leído nada sobre aliens invadiendo la Tierra.

El libro está narrado a dos voces. 

Raven es una chica algo problemática que se encontraba en un campamento de verano cuando ocurrió la invasión. Junto con el resto de monitores, espera allí a que todo termine o que nunca les descubran, hasta que el novio de Raven es asesinado por un alienígena y deben tomar la decisión de irse de allí antes de que sea demasiado tarde.

Por otro lado, Octavo es uno de esos alienígenas que están aniquilando a todos los humanos. Pero él es diferente, él no quiere hacer lo que le han mandado que haga, así que abandona a su grupo y su camino se cruza con el de Raven.

Cada uno de ellos ha aportado información y un punto de vista diferente y totalmente necesario para poder comprender la situación que están viviendo.

Raven es una luchadora nata, pero también tiene momentos de flaqueza, de incertidubre y de miedo por no saber qué ha sido de sus padres o qué les va a pasar.

Gracias a ella, veremos cómo se debaten entre luchar o esconderse, la urgente necesidad de encontrar comida y suministros, de saber si hay más supervivientes y las confrontaciones que todo esto provoca entre ellos.

Octavo será todo lo contrario. Al tratarse, además, de una raza que no habla, sólo se comunican mediante signos, en sus capítulos priman, sobre todo, sus pensamientos que nos harán ver que lo que más ansía es cariño y afecto y lo mal que lo pasa al tener que enfrentarse a sus instintos y a la dependencia que tiene hacia los de su misma especie.

Su evolución es muy notable, pasando de ser un soldado que cumple órdenes a empezar a plantearse las cosas, tener remordimientos y querer ser libre y amado. 

Es un personaje al que se llega a conocer muy bien y con el que acabas sufriendo, tanto por su sentimiento de culpa, su inseguridad, su vulnerabilidad y cómo vas entendiendo que dentro de esa fachada de criatura horrible, se esconde alguien con corazón. 

Realmente curioso ha sido ver cómo los destinos de dos personajes tan diferentes como Raven y Octavo acaban unidos, y cómo ella pasa del odio y la animadversión, a la comprensión, el afecto y el cariño, hasta llegar a algo mucho más complicado y profundo. Algo que sabes que no va a acabar bien ya que cualquier tipo de relación es imposible.

Es una de las dos partes más importantes de la trama y creo que la autora ha sabido desarrollar bastante bien las diferentes fases, encrucijadas y dudas por las que pasa Raven.

La otra, centrada en la invasión, ha sido también intensa y con diferentes cambios de escenarios y personajes, en los que vamos viendo cómo poco a poco crece la desesperación y la intolerancia, hasta que todo explota en un final bastante impactante, en el que la autora ha dejado abiertas varias cuestiones que a mí me han dejado con muchas dudas y con varias teorías en mi cabeza.

Es un libro, por lo tanto, que combina un ritmo pausado, especialmente cuando se centra en los momentos en los que están Octavo y Raven juntos, con otros más rápidos y con mucha más acción. 

Cero se repite siempre es una historia de ciencia ficción con una relación atípica, que me ha mantenido enganchada y que ha sido toda una sorpresa. 

Además, deja la puerta abierta para una segunda parte con mucha más información y mucho más intensa. Espero que no tardemos mucho en poder devorarla. 

*Con la colaboración de Gran Travesía*