Reseña: Kit de supervivencia para mi futura yo - Lara Avery

The Memory Book
Lara Avery
Alfaguara - 2016
302 páginas
16,95 €

Sammie siempre ha tenido un plan: sacar las mejores notas, estudiar Derecho, y ser abogada para defender los Derechos Humanos en Nueva York.
Cree que nada se interpondrá en su camino, hasta que descubre que sufre una extraña enfermedad genética que, según los médicos, le robará los recuerdos y la salud.
Lo que Sam necesita es un nuevo plan.
Decidida a vivir una vida que no puede esperar, se lanza a vivir un verano de primeras experiencias:
Su primera fiesta.
Su primera muestra de rebeldía.
Su primera amistad verdadera.
Su último amor.

Lo primero que me llamó la atención de este libro es que trataba sobre una enfermedad degenerativa. Soy así, siento debilidad por los libros con tintes realistas, aunque después me dejen hecha polvo. No sé si llamarlo masoquismo o qué.

Sammie, la protagonista, es una chica que tenía toda su vida planeada: nada de fiestas, nada de chicos, su objetivo era ser la mejor de su clase para poder entrar en la Universidad de sus sueños a estudiar Derecho y convertirse en una reputada abogada. Ya habría tiempo después para disfrutar de la vida.

Hasta que todo cambia y le diagnostican una enfermedad genética llamada Niemann-Pic tipo C (y sí, existe, yo también lo busqué) que supondrá que, en un futuro, irá perdiendo la memoria y todas sus facultades.

Antes que hundirse, Sammie decide escribir una especie de memorias, en el que irá contando su día a día, cosas de su pasado, de su familia y amigos, para que pueda recurrir a él siempre que sufra una crisis y no recuerde quién es.

Así que esta es una de las particularidades del libro, todo está escrito en forma de diario, en el que la protagonista se dirige a sí misma, lo que lo hace todo mucho más directo, cercano y real.

Ver cómo Sammie hace frente a una enfermedad de este calibre es algo que he agradecido. Es un personaje que pasa por diferentes fases, una chica que, al principio, se niega a dejar que la enfermedad pueda con ella. Está dispuesta a seguir adelante con sus planes y conseguir cumplir sus sueños. No está dispuesta a admitir que nada volverá a ser como antes y ni siquiera querrá que nadie sepa lo que tiene.

No todo serán historias frívolas y consejos contados de forma despreocupada, incluso llegando a bromear y quitándole hierro al asunto, si no que Sammie expresa sus miedos, sus preocupaciones y las primeras señales de la enfermedad.

La autora ha conseguido plasmar de forma convicente cómo se manifiesta, qué supone para Sammie perder de golpe la memoria y no recordar quién es, cómo lo viven las personas de su alrededor y cómo acaba afectando a su día a día.

Pero mientras que Sammie va asumiendo las consecuencias que tendrá esta enfermedad en el futuro, va dándose cuenta de todo lo que iba postponiendo para más adelante. Es entonces cuando empieza a hacer cosas que nunca había hecho antes: ir a fiestas, emborracharse, vivir un primer amor...

Y en cuanto tocamos la parte romántica es cuando creo que comienza a ir cuesta abajo.

Puedo llegar a comprender la necesidad de añadir romance en una historia así, pero no hasta el punto de sobresalir dejando el resto de la trama en un segundo plano, ocasionando un final, bonito y emotivo sí, pero algo precipitado.

Lara Avery estaba consiguiendo contar una historia real, no otra historia de adolescentes enfermos que acaban encontrando el amor, hasta que decide dejar a un lado todo lo demás, para volcarse en un romance típico en el que incluso añade un triángulo amoroso.

No es que no haya sido bonito hasta cierto punto, pero, sin duda, esos capítulos me han resultado innecesarios y carentes de interés.

Kit de supervivencia para mi futura yo es un libro bien escrito, en la que destaco la evolución de la protagonista conforme la enfermedad va progresando, pero que habría ganado mucho más si hubiera seguido centrándose en esas dos cosas, y no añadiendo un romance con bastantes clichés que no aporta realmente nada.

*Con la colaboración de Alfaguara*