Reseña: Helen no puede dormir - Marian Keyes

Título: Helen no puede dormir.

Autora: Marian Keyes.

Editorial: Plaza & Janés.

Nº de páginas: 522.

Precio: 19,90 €.

Resumen: A Helen Walsh todo le va mal últimamente. Es detective privada en Dublín, pero tiene tan poco trabajo que le resulta imposible pagar la hipoteca y las facturas de su piso. Así que no tiene más remedio que volver a instalarse en casa de sus padres. Pero esto no es lo peor: Helen se está hundiendo de nuevo en una gran depresión. Cada vez le cuesta más levantarse, moverse, ducharse o incluso comer. Todo requiere un esfuerzo horrendo. Menos mal que todavía tiene a su novio, paciente y fiel, aunque el hijo de éste la odie y la exmujer la visite con una frecuencia intolerable. Sin embargo, un buen día un exnovio le ofrecerá un trabajo: localizar a Wayne Diffney, miembro de una de las más famosas bandas musicales irlandesas. Estos cinco chicos habían sido conocidísimos hace unos años y ahora se iban a reunir de nuevo para un concierto. Pero Wayne ha desaparecido sin dejar rastro, y su familia jura que no sabe nada de él, aunque parece cada vez más evidente que no quiere que nadie lo encuentre. 

Opinión:

Por fin! Después de tanto tiempo, la reina del chick-lit ha vuelto. Y cierra la saga de las hermanas Walsh con Helen, la más pequeña.

A pesar de que se la considera una autora de novela romántica, Marian se caracteriza por tratar temas actuales y duros, como puede ser la adicción a las drogas, los maltratos o el duelo, con su característico sentido del humor. Y en esta ocasión nos sólo nos habla de la depresión, algo que la misma Marian ha sufrido, si no que también explica la situación económica por la que está pasando Irlanda (muy parecida a la de aquí).

Pero primero pongámonos en antecedentes. Helen es la pequeña de cinco hermanas, irónica, borde, directa, sincera y algo solitaria. Nunca ha tenido muchos amigos, no sabe tener una relación seria y le costó encontrar su vocación: ser detective. 

Después de perder su casa a causa de la crisis y de volver a la de sus padres, es contratada por un antiguo novio suyo para encontrar al miembro de una de las bandas más famosas de Irlanda.

El libro mezcla la investigación que va llevando a cabo, con los momentos en los que Helen se encuentra sola enfrentándose a la depresión y a los momentos del pasado, en el que poco a poco vamos descubriendo lo que Helen, cómo llegó a ser detective y la función que tiene cada personaje en su vida. 

Volvemos a saber, aunque poquito la verdad, más de sus hermanas y sus padres. Mama Walsh siempre regala los momentos más divertidos en cada libro y aunque aquí no hay tanta interacción con su familia (una pena, la verdad), sigue siendo uno de los personajes secundarios más geniales de esta saga.

Una de las cosas que más me gustan de los libros de Marian Keyes es que no crea personajes perfectos llenos de virtudes. Sus protagonistas son personas normales, con sus defectos, con sus errores y que pasan por situaciones por las que pasamos todos. Es por eso que no es nada difícil sentirte identificada con Helen muchas veces.

Los momentos que más me gustaron fueron aquellos en los que la protagonista va explicándonos cómo va entrando en la depresión, los sentimientos que le provoca y cómo intenta por todos los medios no caer y superarla. Está contada de manera tan realista que puedes llegar a comprenderla perfectamente, aunque nunca hayas pasado por eso.

Es una novela llena de humor. Marian es experta en estar contando un momento bastante dramático y darle enseguida un tono de humor para restarle el drama. 

Por supuesto tiene su parte romántica, pero no es lo más importante en el libro. No llega a ser ñoña ni empalagosa.

Todos los personajes están muy bien conectados entre ellos. El final cierra perfectamente todos y cada uno de los misterios que rodea el libro, no solamente el que investiga la protagonista si no todos los que rodean a la protagonista. 

Si tuviera que ponerle un pero sería que hubo partes centradas en la investigación que me resultaron algo lentas y pesadas. No es que no me interesara o me pareciera aburrido. Si no que encontré que muchas situaciones se repetían, que no avanzaba hasta bien entrado el libro. Que ocupa demasiadas páginas y que hubiera preferido más profundidad en la vida de Helen y en su enfermedad.

En conclusión, Helen no puede dormir es un gran libro para cerrar la saga y una vez más vuelve a demostrar por qué es una de las reinas en este género. 

Un libro que mezcla drama, humor, misterio y romanticismo a partes iguales y que encantará a todos los fans de este género. 

Puntuación: